Nano Dimension ha vendido el último sistema DragonFly IV para electrónica de fabricación aditiva (AME) a la Universidad de Stuttgart. La impresora 3D electrónica más avanzada de la firma israelí irá al Instituto de Sensores Inteligentes (IIS) de la Universidad y al 3er Instituto de Física (PI3). Los dos grupos están trabajando conjuntamente en el diseño y la integración de sensores cuánticos de próxima generación como parte de un programa patrocinado por el gobierno conocido como Cluster4Future QSens (“QSens”).
Grupos de la Universidad de Stuttgart están colaborando con 19 socios industriales y tres institutos de investigación para impulsar el uso industrial de sensores cuánticos con el objetivo de ingresar al mercado a gran escala dentro de los próximos tres a cinco años.
DragonFly IV es un habilitador de innovación clave en aplicaciones especiales para dispositivos electrónicos de alto rendimiento (Hi-PED) al depositar simultáneamente sustancias conductoras y dieléctricas patentadas mediante la integración de condensadores, antenas, bobinas, transformadores y componentes electromecánicos in situ. Dichos Hi-PED son habilitadores clave para una amplia gama de aplicaciones, incluidos drones inteligentes autónomos, automóviles, satélites, teléfonos inteligentes y dispositivos médicos in vivo.
Además, estos productos permiten el desarrollo iterativo, la seguridad de la propiedad intelectual, un rápido tiempo de comercialización y mejoras en el rendimiento del dispositivo. En el contexto de las tecnologías cuánticas, las capacidades de integración de electrónica 3D de Dragonfly® IV permitirán posibilidades completamente nuevas para la integración de microelectrónica y fotónica de la próxima generación de dispositivos cuánticos escalables.
Nano Dimension ha vendido el último sistema DragonFly IV para electrónica de fabricación aditiva (AME) a la Universidad de Stuttgart. La impresora 3D electrónica más avanzada de la firma israelí irá al Instituto de Sensores Inteligentes (IIS) de la Universidad y al 3er Instituto de Física (PI3). Los dos grupos están trabajando conjuntamente en el diseño y la integración de sensores cuánticos de próxima generación como parte de un programa patrocinado por el gobierno conocido como Cluster4Future QSens (“QSens”).
Grupos de la Universidad de Stuttgart están colaborando con 19 socios industriales y tres institutos de investigación para impulsar el uso industrial de sensores cuánticos con el objetivo de ingresar al mercado a gran escala dentro de los próximos tres a cinco años.
DragonFly IV es un habilitador de innovación clave en aplicaciones especiales para dispositivos electrónicos de alto rendimiento (Hi-PED) al depositar simultáneamente sustancias conductoras y dieléctricas patentadas mediante la integración de condensadores, antenas, bobinas, transformadores y componentes electromecánicos in situ. Dichos Hi-PED son habilitadores clave para una amplia gama de aplicaciones, incluidos drones inteligentes autónomos, automóviles, satélites, teléfonos inteligentes y dispositivos médicos in vivo.
Además, estos productos permiten el desarrollo iterativo, la seguridad de la propiedad intelectual, un rápido tiempo de comercialización y mejoras en el rendimiento del dispositivo. En el contexto de las tecnologías cuánticas, las capacidades de integración de electrónica 3D de Dragonfly® IV permitirán posibilidades completamente nuevas para la integración de microelectrónica y fotónica de la próxima generación de dispositivos cuánticos escalables.